Cómo viven los ricos hoy día gracias al dinero a pesar de la situación tan
dramática a nivel económico en el mundo es algo que bien puede causar la
envidia de más de uno.
A pesar de la crisis económica más profunda de nuestra
historia moderna, algunos privilegiados viven como verdaderos ricos multimillonarios con ingentes cantidades de dinero y siguen disfrutando de
comodidades y caprichos que no resienten sus bolsillos a pesar todo.

Luz, gas, agua, transportes, alimentación, ocio... El
gobierno de Mariano Rajoy anunció la subida del IVA, una noticia que ha caído
como un jarro de agua fría y ha provocado el descontento de los españoles, sin
contar los recortes que se verán obligados a afrontar cuando la mayoría no ven el momento de llegar
a fin de mes y poder pagar todas las facturas y hacer frente a los gastos
familiares. Sin embargo, en España, sigue existiendo una enorme brecha que
separa a unos ciudadanos de otros. A los ricos que poseen dinero de los que no lo son y no lo tienen. Mientras unos se quedan sin trabajo y ven cómo su vida se desarma en unos pocos
meses, llegando incluso a no poder afrontar el pago de su hipoteca , otros no
sólo no han bajado su ritmo de vida sino que continúan disfrutando de
comodidades y caprichos, aumentando incluso su poder adquisitivo y riqueza. Son
clientes que no entienden de crisis ni de números rojos. Viven como ricos gracias al dinero
que poseen.
Cómo viven los ricos gracias al dinero

En 2010 movió más de 3.600 millones de euros en España
(170.000 en todo el mundo), lo que supuso un incremento del 12 por ciento con
respecto al año anterior, mientras que según un informe del IE Business School,
el mercado del lujo personal (moda, accesorios, cosmética, relojería y joyería)
generó en 2011 en España unos 5.000 millones de euros. Evidentemente, el dinero es lo que permite a los ricos vivir así. No es que sean más guapos que el resto de los mortales. Sin embargo, uno de los
datos que más llama la atención es que a estos buenos datos ha contribuido el
consumo por parte de los extranjeros, que ha compensado el descenso de este
consumo interno (el 30 por ciento corresponde a compras de turistas
extranjero).