
Hace unos días, el Sr. Rajoy comunicaba la decisión de subir el IVA al 21%, bajar las prestaciones por desempleo y eliminar la paga de Navidad a los funcionarios entre otras medidas. Con ellas, pretende ahorrar 65.000 milloncillos de euros. Para justificar semejante "tijeretazo", el Presidente confesó que la situación era tan mala que incluso "necesitamos que nos presten dinero para pagar las prestaciones e incluso la nómina de los funcionarios".
Pero, Sr. Rajoy, ¿qué piensa usted que va a conseguir con éstas medidas aparte de que quieran matarlo?. ¿Acaso otros países de la eurozona no han sido presionados igualmente a tomar idénticas medidas de ajuste sin obtener mejoras reales?. ¿Acaso Grecia o Irlanda han mejorado realmente después de implementar sus medidas de ajuste?. Ya sabemos que no. Todo lo demás son excusas.
Lo hemos visto en otros países "rescatados". Rescatados para seguir pagando su deuda. Pagando deuda con más deuda. . Y esto, inexorablemente, lleva a los países a su quiebra total. Por cierto, la deuda de España es de 900.000 millones de euros. La pérdida de derechos y el próximo fin absoluto del "estado del bienestar", es la imagen de un sistema degradante donde unos pocos gobiernan a los muchos sin importarles su final. A mi no me va a convencer, y creo que a ninguna persona sensata tampoco.
Estas medidas, Sr. Rajoy, van a fomentar muchas cosas. Es verdad. Van a fomentar mayor desempleo, menor consumo, menor poder adquisitivo, empleos precarios con sueldos casi ridículos y mayor fraude fiscal entre otras. Y puesto que este sistema es un sistema en cadena, al final todos los sectores de la sociedad acabarán viéndose perjudicados y por tanto, alimentando el círculo vicioso. Y todo ello, para que nuestros prestamistas puedan seguir transfiriendo las riquezas de los países a sus cuentas.
En breve, se sentarán a estudiar si el actual sistema de pensiones es sostenible, si el actual número de funcionarios es sostenible y si el actual sistema sanitario es sostenible, para pasarles a todos la tijera otra vez. Como el chiste del elefante y la hormiga, nos la irán metiendo poco a poco. Es lo mejor, ¿verdad?. Así se consigue que el pueblo se vaya acostumbrando a los cambios, alterándolo lo justo para presentar más adelante otro mayor.
