Hoy, el PP ha aprobado el mayor recorte de la democracia gracias a su mayoría absoluta y con toda la oposición en contra. No cabría esperar otra cosa, aunque oposición, lo que se dice oposición, no se ha demostrado mucho que sea si tenemos en cuenta que el día que se anunciaron los ajustes que pretendían ahorrar al estado 65000 millones de euros, algunos opositores más bien parecían afiliados. Y es que o alzas la voz o te pueden confundir con el enemigo, señor Rubalcaba. (Vaya, no quería decir nombres).

Para colmo, resulta que el señor Rajoy no estaba allí para dar la cara y exponer las razones de semejante y bárbaro ajuste (el primero de muchos que vienen). En su lugar, otro "buen hombre" de nuestra clase política, el Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas Cristóbal Montoro (qué pompa de título), alegaba ante los demás diputados que "no hay dinero en las arcas públicas para pagar los servicios públicos". Luego, rogó el apoyo de los demás miembros pertenecientes a la oposición sin evidente éxito. Me estoy imaginando la representación tan sentida y entusiasta de este hombre en el día de hoy ante tan maravilloso público. Al menos, dejó claro que los ajustes eran una recomendación expresa del FMI y la UE. Y es que una recomendación "expresa" de estos organismos es como un buen café: no se puede rechazar. Es lo que comúnmente se llama poner el culo en pompa si te lo piden amablemente y si no, también.
Rubalcaba al menos, criticó la ausencia de Rajoy en un momento como éste, y aseveró que lo peor era que "los errores del gobierno, y ya van muchos, los pagan los españoles". Sí, una verdad como un castillo. Pero el problema es que no se trata ni de errores ni de quién los pagará, sino de que los españoles, no pueden ser despojados de sus derechos y bienestar ni por la UE, ni por el FMI ni por el PP ni por ningún aluvión de siglas como éstas jamás. Y lo peor es que al final, después de quedarnos secos gracias a estos gobernantes pusilánimes que tenemos y haber sido buenos pagadores de nuestra deuda, entonces nos quedaremos todos igual de solos que el PP hoy. ¡Y si no hay dinero, que le den a funcionar a la maquinita de hacer dinero!. Ah no, que está en manos de una entidad privada llamada BCE.
A lo que hemos llegado...